


1. ¿Cómo te sentiste cuando te dijeron que tenías que marcharte tan lejos?
- Al principio tuve miedo pero pronto me enteré que no seríamos los únicos, algunos de mis amigos marcharían con nosotros. En aquellos momentos tampoco había mucho tiempo para pensar y los niños aceptábamos sin protestar las decisiones de nuestros padres, no como vosotros que todo lo cuestionáis y protestáis por todo. Luego supimos que los que pudimos marchar fuimos afortunados, porque los que se quedaron no lo pasaron nada bien.2. ¿Cómo fue el viaje?
- Mis padres nos llevaron a Bilbao a coger el tren que nos llevaría hasta Santurtzi donde teníamos que embarcar en un gran barco llamado La Habana. Nos despedimos en la estación y yo no paraba de llorar, cuando llegamos a Santurtzi salí corriendo y me escapé para ir a casa de mi tíos que vivían en Mamariga, pero no llegué muy lejos porque un Gudari, amigo de mi aita, me reconoció… (recuerda y le sale una sonrisa)
me paró y me llevó de vuelta al puerto para subirme al barco.
3.¿Dónde os llevaron cuando llegaste?
- Desembarcamos en la isla de Olerón y fue allí donde pasé uno de los peores momentos del viaje cuando me separaron de mi hermano mayor, del que no me había separado ni un minuto en todo el viaje. A él le llevaron a Bruselas y a mi a Orly, cerca del campo de aviación. Era un colegio enorme y los primeros días lo pasé fatal. El único buen recuerdo que tengo de esos días son los bollos que nos daban para desayunar. Eran buenísimos.
4.¿Qué hacías en el colegio?
- Los días transcurrían con normalidad, estudiábamos en castellano pero también aprendimos rápidamente a hablar francés, los fines de semana nos llevaban de excursión a París y a alguna vez nos acogían en familias particulares; a mi eso no me gustaba porque prefería quedarme en el colegio con mi amigos.
De repente cogí una fuerte infección en los ojos y me quedé ciego. Me llevaron al hospital y recuerdo que estuve vendado igual una semana. Luego, de repente, la vista me volvió.
5.¿Cuál es el mejor recuerdo que tienes de esa época?
- Sin ninguna duda, mi mejor recuerdo es cuando conocí a Picasso, jamás he olvidado el tiempo pasado con él (coge un libro de arte que tiene en la mesa y lo recuerda con respeto). Yo destacaba en el colegio porque dibujaba y pintaba muy bien, cuando un día vino Picasso a visitarnos los profesores le enseñaron mis dibujos y me dijo que lo hacía muy bien. A partir de esa visita, a otros dos niños y a mi nos recogía en el colegio y nos llevaba a muchos sitios con él, por su puesto nos llevó muchas veces al Loubre.
6.¿Qué recuerdas de Picasso?
- Nos tomó como alumnos y pasábamos muchos días con él en su taller, donde nos enseñaba muchas cosas. Recuerdo que el taller estaba en una pequeña callejuela de Paris.
- En esos momentos estaba pintando el Gernika y me acuerdo que uno de los niños tiró, sin querer, un bote de pintura y Picasso echó un juramento muy enfadado (dice riéndose), nosotros nos asustamos, pero en seguida nos pidió disculpas y todos nos reímos. Fueron unos días maravillosos.
- Me regaló dos dibujos a lápiz firmados y dedicados parecidos al de la foto, pero al regresar al colegio nos los quitaron… !Ahora tendríamos una fortuna!
7.¿Te quedaste mucho tiempo en Francia?
- A raíz de conocer a Picasso mi estancia cambió totalmente, me presentó a una familia que no tenían hijos y me acogieron en su casa, dejé de ir al colegio donde estábamos internos y me metieron a otro mucho mejor con niños franceses sin perder el contacto con Picasso que me daba algunas clases de pintura en mi nueva casa.
Al principio no quería quedarme, pero según pasaba el tiempo me encontraba feliz y totalmente integrado en la familia y en mi nueva vida.
8.¿Qué recuerdas del regreso?
Cuando tuve que marchar ya no quería volver, no regresé con el resto de los niños, sino mucho más tarde.
Luego me enteré que se trataba de una familia de diplomáticos franceses que se querían quedar conmigo, y estuvieron intentándolo por todos los medios intentando averiguar si mis padres habían muerto o no y esperando a ver si alguien me reclamaba.
Por su parte, mis padres al ver que no volvía, removieron cielo y tierra hasta dar conmigo y conseguir que regresara.
Estuve unos dos años con esa familia y recuerdo que cuando llegué a Portugalete no sabía decir ni pío en castellano y aunque me sentía muy contento con mis padres y mis hermanos echaba mucho de menos a todo y a todos los que dejé en París.
9.¿Continuaste pintando al dejar Francia?
- Pintaba antes de ir a Francia y cómo no, seguí pintando a mi regreso, de hecho nunca he abandonado los lápices hasta que no me ha quedado más remedio por falta de visión, ya hace unos 15 años empecé a necesitar lupas de gran aumento para poder dibujar y eso empeoró aún más mi visión ahora ya llevo más de 5 años sin tocar las plumillas.
10.¿Qué técnica utilizabas en tus cuadros?
- He utilizado prácticamente todas las técnicas, Oleos, ceras, acuarelas y tintas, pero la que más me ha gustado y donde me he desenvuelto con más seguridad es con las plumillas, es una técnica que ya prácticamente, desde que se inventó el rotring nadie realiza y es la causante de mi pérdida de vista ya que se trata de trazados de tinta muy pequeños que necesitan de una buena vista.
11.¿Has vendido algún cuadro?
- Nunca me he dedicado profesionalmente a ello pero eso no quita a que haya expuesto algunas veces en salas de arte de Bilbao y San Sebastián, lo que nunca he hecho es vender mis cuadros, me cuesta desprenderme de ellos porque todos son parte de mi, por eso solo los regalo a aquellos que les gusta y saben apreciarlo, bueno esto no es del todo cierto porque cuando era jovencito me sacaba algún dinero vendiendo mis dibujos y también alguna sala de arte me compró un par de cuadros.
12.¿Alguien de tu familia ha seguido la tradición?
- Pues no, esa es mi gran pena, a ninguno de mis hijos les ha dado por coger los lápices, y no será porque no hayan vivido rodeados de plumillas, tintas y tinteros, de hecho tenía la esperanza de que a ti te gustara pero ya ves que no es así (dice acariciándome el pelo). Me queda la satisfacción de que al menos todos, incluido tú tenéis cierto respeto por la pintura y conocéis al dedillo los museos de vuestra ciudad.
13.¿Continúas visitando los museos?
- No voy todo lo que quisiera, desde que estoy en silla de ruedas dependo más de la gente de mi alrededor, como tú, para ir de un sitio a otro, pero no dejo de ir a todas las inauguraciones que me mandan tanto del Museo de Bellas Artes como del Guggengeim, la última a la que he asistido es la de Lazkano en el de bellas Artes y la última a la que tú me has acompañado es a la de Sorolla hace un par de años.
14.¿Te gustaría volver a París?
- He vuelto en varias ocasiones, la última contigo cuando eras más pequeño y te enseñé el Loubre., fue una semana muy bonita, pero tal y como estoy ahora, con los museos de mi alrededor y mis libros de arte tengo que conformarme.
Y para terminar… una última pregunta :
15.¿Eres Feliz?
- Buena pregunta. Cuando murió mi mujer, tu amama, pensaba que ya nada podía hacerme recuperar mi vida, pero estaba equivocado, tú eres lo mejor que tengo, vivo con mis dos hijas y mi nieto y aunque tu y yo discutamos siempre por el mando de la tele… ¿qué más puedo pedir? Soy feliz simplemente al contestarte estas preguntas.
Valentín Canabal nació en Portugalete, noble e invicta villa marinera, tal y como a él le gusta decir, allá en el año 1927.
Fue el tercero de cinco hermanos y cuando estalló la guerra civil, sus padres decidieron mandar a Rusia a los mayores. No se sabe bien porqué pero terminaron en Paris.
Valentín Canabal
“Jamás he olvidado el tiempo pasado con Picasso"
Su día día...
Valentín Canabal, Portugaleten jaio zen 1927ean. Portugaleteko eskolan ikasi zuen eta guda zibilean Frantziara joan zen barnetegi batera. Frantzian begietan infekzio bat izan zuen eta ospitalean ingresatu zuten. Errekuperatu zenean barnetegitara itzuli zen. Barnetegian Picasso ezagutu zuen eta oso ondo marrazten zuelako ikasle bezala hartu zuen. Picassoren lagunak ziren familia frantzes batek haien etxean bizitzen utzi zioten. Parisen 5 urte egon zen eta Picassorekin artea ikasi zuen. Portugaletera itzuli zen eta bere aitarekin lanean azi zen, konstruktore moduan. Ezkondu eta bilbora bizitzera joan zen. Hiru seme eduki zituen eta 59 urterekin bere emaztea hil egin zitzaion. Urte batzuk geroago bihotzetik operatu zioten eta 5 by-pass jarri zioten. 75 urterekin mihizko kantzer bat eduki zuen eta mihi erdia kendu zioten. 80 urterekin zirkulazio txarrarengatik hanka bat kendu zioten. Orain marrazten jarraitzen du baina oso gutxitan. Nirekin eta nire ama eta izekorekin bizitzen du. Bere eguneroko bizitzan asko irakurtzen du, telebista ikuzten du eta muletekin dagoenez kalera ezin da atera eta balkoira ateratzen da. Oporretan laredora joaten da eta batzuetan gurpileko ezarleku batean gurekin kalera ateratzen da. Adinarekin lotutako aldaketa asko eduki ditu, mihiaren kantzerragatik pureak bakarri jan ahal ditu, anka ortopediko bat dauka eta muletekin ibiltzen da, bista galtzen hasi da eta belarri batetik ez du entzuten.
Botika asko hartzen ditu, adibidez plavix, tropidosel, renitec, noctamid, flamil, zolisten… Batzuetan botika hartu ez duela pentsatzen du eta birritan hartu ditu.